miércoles, 23 de abril de 2008

En la relación amorosa se pone en juego la libertad individual a favor del vínculo. Pero un vínculo de esta clase no puede durar porque la libertad es esencial para un ser humano, y en algún momento se pondrá esta necesidad en evidencia.
No se puede elegir entre el amor de alguien y los intereses personales. El sacrificio de renunciar a ellos por amor deja un residuo de resentimiento que no se borra con besos ni abrazos.
La persona que vive para el otro sin condiciones se opaca hasta quedar reducida a una sombra, la sombra del otro.
Esa devoción, lejos de atraerlo termina alejándolo, porque sólo se puede amar a una persona con identidad propia.
En el amor de pareja el conflicto es parte de la relación, porque son dos seres libres que pueden llegar a obstaculizarse mutuamente.
El camino de la negociación es el único viable en estos casos siempre que éste no implique estancamiento de alguno de los dos.
El amor no puede ni debe ser una cuestión puramente emocional, necesariamente debe ser un sentimiento reflexivo, porque si no fuera así seríamos esclavos de él y además de podría llegar a convertir en odio.
Como bien decía Freud, el único amor posible sin condiciones es el de una madre por su hijo.
Los demás vínculos afectivos deben ser racionales, no se puede aceptar, en nombre del amor, el desprecio, la infidelidad, la mentira o el maltrato.
La persona que quiere vivir en permanente estado de enamoramiento, alienada en el otro, se verá obligada a lo largo de su vida a tener un gran número de parejas inestables y a sufrir la desilusión o el abandono.El amor no puede borrarlo a uno de la escena para ser el otro. El otro siempre será otro diferente y nunca en una pareja los dos alguna vez podrán ser uno.
El amor maduro a veces llega gracias a una gran desilusión. Después de haber sufrido un gran amor que también destruyó la autoestima, se puede recuperar la razón y comenzar a creer que tiene que ser posible amar y ser feliz al mismo tiempo.
Estar enamorado no es sinónimo de querer a alguien, porque es un estado de alienación que idealiza al otro al extremo de no verlo tal cual es.
Como con una droga somos esclavos de sus efectos, aunque las acciones colaterales sean desastrosas.
Solamente es posible tener una pareja estable por mucho tiempo cuando los dos siguen creciendo.
Es inútil pretender que alguien nos quiera si no le place. En un amor sin esperanza somos perdedores de entrada porque no existe nada menos atractivo que el que se humilla.
Además, lograr una conquista de esa manera obliga a entregarse sin condiciones, porque todos sabemos que el que tiene el poder en una relación es el que menos necesita del otro.
Por otro lado se está renunciando a la propia dignidad, al respeto por uno mismo, porque la esclavitud se opone a la dignidad, cuando uno se convierte en un objeto.
No todos los conflictos de pareja se resuelven con una negociación, se necesita además una dosis de paciencia, intercambio de opiniones, aprender a equilibrar las diferencias, establecer acuerdos, armonizar desajustes, etc.
El amor romántico es un arma de doble filo, nos puede dejar hechos picadillo y tiende a desaparecer en poco tiempo.

sábado, 19 de abril de 2008

Cuando caiga la tarde, lo verás salir arrastrando de casa el calor del hogar.
Cortará alguna flor, besará a su mujer,perseguirá la estela de un cometa fugaz.
Y en la calle lo verás abrir la flor de su secreto.
Y empezará a soñar.Quizá vaya al billar a mirar hombres y posturitas .Quizá invente una cita con un Adonis para él.
Ningún hombre lo amó.A nadie reveló su pasión y los juegos,el deseo clandestino.No hubo cartas de amor,no hubo día del orgullo.No le devolverán los veranos perdidos.Y Cernuda lo ve suspirar, triste, desde el Parnaso.San Sebastián asaetado reza por tus pecados,llora por ti, no olvida al que sufre en silencio a su oveja perdida.
Miran al cielo y piden un deseo:contigo la noche más bella.Amores imposibles que escriben en canciones el trazo de una estrella.Cartas que nunca se envían.Botellas que brillan en el mar del olvido.Nunca dejes de buscarmela excusa más cobarde es culpar al destino.Cuando salga de clase, lo volverá a encontrar en el lado salvaje, tras el humo del hash.Él, dulce calavera. Él, corsario de barrio.Ella, dulce muñeca. Ella, seria y formal.Él no escucha el rumor de sus alas si pasa a su lado.Pobre Blancanieves,nuestro príncipe prefiere a la madrastra,a la mala del cuento.Él será la manzana donde duerme el veneno.Ella soñará un verso que él nunca escuchará.Él no trepará sus trenzas una noche de invierno.Ella soñará un viaje y no habrá despedidas.Ni canciones de amor, ni Capuleto y Montesco.Crecerán y en la espuma del tiempo se deshacen sus sueños.No quedará ni un recuerdo,ni en la noche un lamento.Quizá una leve herida que lavará el olvido el agua de la clepsidra .
Caminando hacia el sur, tomando la autopista,han abierto un garito, muy cerquita del pueblo,donde huríes desnudas venidas de cien mundos celebran cada noche catorce de febrero.Y en la aldea un hombre suspira si el neón se ilumina.No tuvo Eva este Adán,no hubo asiento de atrás,ni caricias, ni cartas perfumadas,no hubo cita en el parque.No hubo chicas de Plan .Cuando caiga la noche lo verás entrar como cada domingo aseado y puntual.La encontrará en la barra, como a un delfín varado que ha perdido su estrella, que un día expulsó el mar.Ella escucha y él, enamorado, desnuda sus miedos.Entre el ruido, benjamines de champány otros delfines cobrando su rescatea náufragos perdidos sueña raptar a su amante.