Indagando sobre las causas del rencor pensé en ese refrán que dice "no te hace daño quién quiere sino quién puede". Es decir que las personas que tenemos cerca, las que más queremos son las que nos pueden defraudar o hacer daño. Sin embargo, aunque a muchos de nosotros nos han defraudado o decepcionado, incluso traicionado hay personas que acumulan más rencor y no sólo no perdonan, sino que tampoco olvidan. ¿Que mecanismos son los que interactuan en el proceso del rencor y el resentimiento? ¿la cantidad o calidad de perjuicio ocasionado? ¿la persona que nos lastima? ¿el momento personal en el que nos encontremos? ¿características de personalidad de la persona perjudicada? ¿el tipo de intención que hayamos evaluado en el sujeto ejecutor de la afrenta? En otras ocasiones solo ponemos en una balanza cuanta confianza nos sustrajeron tras el agravio reconocido. Lo que si es cierto es que el rencor aparece de forma irracional y es una reacción a flor de piel, poco meditada, que emerge con fuerza, dificil de controlar y es un sentimiento mezquino, negativo que no nos aporta nada, de él todo lo que aprendemos es futil. Jamás sentí rencor pero ayer alguién que me visitó con sus palabras lo describió nitidamente,me lo transmitió desde sus labios envenenados,al escucharla senti un escalofrio y porque no también decepción, entre sus defectos no había incluido el de rencorosa. Si tengo claro que esa decepción no me conducirá al rencor.
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